[Rol] Gilledus se fustiga con su látigo de 9 colas en la espalda. La cual comienza a sangrar por los diversos latigazos. Su cara inmutable parece no responder al dolor.

[Rol] Gilledus se arrodilla y comienza una leve oración a Seldar.

[Rol] Gilledus reza en voz baja.

[Rol] Gilledus se levanta con los ojos brillantes sin parar de mirar el pequeño altar de Seldar situado en sus aposentos.

[Rol] Wub Wub encuentra algo metálico en el suelo de la taberna, ha visto a humanos usarlo como utensilio.

[Rol] Wub Wub lo empuña y lo introduce en su orificio nasal.

[Rol] Skrach no entiende cómo hay criaturas que se infligen daño a sí mismos por voluntad propia.

[Rol] Gilledus se coloca su sotana sobre las heridas sin curarlas.

[Rol] Wub Wub consigue extraer una gran cantidad de mocos que se lleva a la boca.

[Rol] Wub Wub parece satisfecha, este utensilio para recoger mucosas le está siendo muy útil.

[Rol] Gilledus sale de sus aposentos, a la vez que un hermano Inquisidor le avisa rudamente. - Hermano Regente, parecen que hay alguien raro en la taberna, dicen que puede ser un espía.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Convoca a mis inquisidores personales, echaremos un vistazo en la Tabaner de los dos clavos.

[Rol] Wub Wub con un brusco movimiento parte el utensilio y restos de éste quedan incrustados en lo más profundo de su fosa nasal.

[Rol] Gilledus recoge su armamento rápidamente y se coloca su medallón calavérico y su distintivo de la Inquisición bien visibles en el pecho.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Seguidme, mis hermanos, tened cuidado pues esos tipos sin impredecibles...

[Rol] Gilledus se dirige a la Taberna de los dos clavos rápidamente.

[Rol] Wub Wub introduce la afilada uña de su dedo meñique en su orificio nasal tratando de recuperar el trozo de metal, pero sólo consigue meterlo más dentro.

La puerta de la taberna es abierta rudamente por los inquisidores. El sonido hace que toda la sala se quede mirándolos impasibles.

[Rol] Gilledus mira la sala y a todos los comensales. Solo puede distinguir a dos sospechosos, un goblin que parece retorcerse mientras intenta sacar algo de su nariz. Y un humano que nunca
 había visto por allí.

[Rol] Wub Wub no puede soportar más el dolor, no encuentra nada con lo que extraer el metal.

[Rol] Wub Wub coge carrerilla y comienza a correr directa contra la pared.

[Rol] Gilledus después de prestar atención al goblin, parece descartarlo pues parece el mismo goblin que el otro día comió un gato vivo, además este no para de hacer gestos extraños, como
 si no pudiera sacar lo que tiene en la nariz.

[Rol] Wub Wub cuando está  a punto de llegar agacha la cabeza y golpea secamente contra la pared.

[Rol] Gilledus señala al humano.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Detenedle, es una espía del Culto al Lujo.

[Rol] Wub Wub algo mareada tras el golpe, observa que aún tiene el objeto en la nariz, será cuestión de repetir la maniobra.

[Rol] Wub Wub coge carrerila y en su carrera derriba a un humano que trataba de huir de la taberna.

[Rol] Wub Wub choca sonoramente su cabeza contra las partes nobles del humano, dejándolo agonizando en el suelo.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Atrapadlo ahora, este goblin parece hacer vuestro trabajo.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Registradlo aquí mismo.

Los inquisidores comienzan a registrar al humano y de su ropajes sacan una máscara de color morado...

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Es el distintivo de su organización!

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Espía!

[Rol] Wub Wub observa algo brillante en el suelo, gracias a este último impacto ha conseguido librarse del molesto objeto.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Llevadlo a una celda, luego me encargaré de él.

Espia: No conseguireis nada!! El culto al Lujo ganará esta guerra!!

Gritaba el espía mientras era arrastrado hacia las mazmorras de la ciudadela de Galador.

[Rol] Gilledus da dos palmadas en el hombro a Wub.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Bien hecho pequeño amigo.

[Rol] Wub Wub balbucea: 'wub'

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Puedo hacer algo por ti?

[Rol] Gilledus mientras esboza una leve sonrisa.

[Rol] Gilledus ve que el goblin parece estar absorto con lo que acaba de sacar su nariz.

[Rol] Gilledus se dirige al Tabernero.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Esteban, que no le falte de nada al pequeño. La inquisición corre con sus gastos por su labor.

Esteban: Si señor no le faltará de nada.

[Rol] Wub Wub algo confusa por el golpe recibido, decide acurrucarse en un rincón de la taberna junto a una fuente de algún asado que el tabernero le ha proporcionado.

[Rol] Gilledus palmea levemente la cabeza de Wub.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Hasta más ver pequeño amigo, hasta más ver...
> 
[Rol] Wub Wub balbucea: 'wub'

[Rol] Gilledus sale de la Taberna y pone rumbo a las mazmorras de la Ciudadela.

[Rol] Gilledus atraviesa la entrada a la Catedral mientras todos los presentes van arrodillandose ante él.
 
[Rol] Gilledus gira levemente hacia la derecha y se introduce en las escaleras que van hacia las mazmorras.

[Rol] Gilledus saluda brevemente a la Carcelera de las mazmorras.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: ¿Donde han metido mis inquisidores al espía encontrado en la taberna?

Carcelera: Está aqui señor, sigame.
 
[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: No, llevelo a la sala del agua.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Allí realizaré el interrogatorio.

Carcelera se acerca a una de las celdas y escucha los gritos de un prisionero con cara de satisfacción.

Carcelera dice: Escucha como gritan y mueren esos cerdos infieles. Si creen que ésto es sufrir no saben lo que les espera en el infierno con Seldar hahahahaha.

Carcelera asienta a Gilledus y se dirige a por el Prisionero.

[Rol] Gilledus gira por el primer pasillo a la izquierda, y abre la puerta del fondo.

[Rol] Gilledus entra en la sala de tortuta del agua, una sala oscura, sin ningún mobiliario en ella, a excepción de lo que parece ser una gran mesa en el centro, en la que se observan alambre
 de espino en ciertas localizaciones, y en medio de ella una gran toalla roja, no sabes si llena de sangre o es su color. En las esquinas de la sala, cubos y cubos rellenos de los que parece ser
 agua.

[Rol] Gilledus se prepara para el interrogatorio, se coloca a los pies de la mesa y se remanga las mangas de la sotana.

Al momento la Carcelera irrumpe en la sala con el Prisionero agrilletado en pies, manos y cuello.

Carcelera: Aquí teneis señor.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Colocadlo en la mesa y decid que pasen los inquisidores que se encuentran en la puerta esperando.

La carcelera asiente, y sale por la puerta, nada más salir, tres inquisidores entran en la sala, y a las ordenes de Gilledus cierran la puerta tras de sí.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Quitadle los grilletes y tumbadlo en la mesa. Atad el espino a sus muñecas cuello y tobillos.

Los inquisidores quitan los grilletes y tumban en la mesa al prisionero por la fuerza.

Prisionero: No!! Que hacéis bastardos!! - El espía intenta safarse pero a base de golpes hacen que este se quede quieto.

Los inquisdiores prosiguen y terminan de amarrar al prisionero fuertemente contra la mesa.

[Rol] Gilledus comienza a pasearse por la sala alrededor del Prisionero.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Me diréis todo lo que quiero saber.

Prisionero grita: No os diré nada! El Culto al Lujo vencerá!

[Rol] Gilledus propina un bastonazo en el estómago al Prisionero que le hace perder la respiración.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Aún no podeis hablar no os he preguntado.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: ¿Donde está vuestro líder?

Prisionero: No os lo dir....

[Rol] Gilledus propina otro bastonazo en el estomágo del Prisionero.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Coged la toalla. No voy a andarme con tonterías.

Uno de los inquisidores empapa la toalla en agua y se la da a Gilledus.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: ¿Donde está vuestro líder?

Prisionero: NO OS....

[Rol] Gilledus coloca la toalla en la boca del espía, que no para de balbucear en vano.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Coged los tubos, traed dos cubos de agua.

[Rol] Gilledus coloca dos tubos bien dentro de las fosas nasales del espía. Y comienza a verter agua por ellos.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Como puedes estar sintiendo, el agua está yendo dirctamente a tu estómago.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Con esa toalla húmeda en la boca, no podrás vomitar. Y poco a poco tu estómago se llenará hasta
 explotar...

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Así que te daré otra oportunidad...

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: ¿Dónde esta vuestro LÍDER?

[Rol] Gilledus retira la toalla de la boca del Prisionero.

Prisionero: NO...

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Mal amigo mío, mal, estás decidido a morir por quien te ha traicionado, oh como crees que te hemos
 encontrado...

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Traed más cubos.

Los inquisidores traen 3 cubos de agua.

[Rol] Gilledus repite el proceso anterior, colocando de nuevo la toalla bien afianzada en la boca del Prisionero.

Uno de los Inquisidores se coloca de pie sobre la mesa por ordén de Gilledus.

La barriga del Prisionero parece hincharse como si fuera un globo. Parece estar a punto de explotar.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Solo lo preguntaré una vez más, tu decides si ser amigo mío o enemigo...

[Rol] Gilledus comienza a hablar con una voz muy pacífica.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: ¿Dónde está tu líder?

De la boca del prisionero comienza a salir una gran cantidad de vómito y agua. hasta que este puede llegar a hablar...

Prisionero: Por favor no me mates, por favor.... yo sólo contacto con alguien en Ryniver, no conozco al lider.. por favor...

Confiesa el espía entre lloros.

[Rol] Gilledus toca la cara del espía mientras sonríe.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Muy bien amigo mío, muy bien. Mis amigos cuidaran de tí. Has hecho un gran trabajo.

[Rol] Gilledus vuelve a colocar la toalla en la boca del prisionero.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Acabad con él.

El alambre de espino clavado en los brazos, piernas y cuello del espía impiden su movimiento... Los Inquisidores comiezan un cubo tras otro por sus fosas nasales. Cuando su Estómago está
 apunto de reventar, el inquisidor que está encima de la mesa salta sobre él, haciendo que su estómago acabe por romperse.

[Rol] Gilledus el Regente Inquisidor: Ya hemos terminado el trabajo, dejadlo aquí hasta que muera...

[Rol] Gilledus sale de la sala acompañado de sus Inquisidores y cierran la puerta con llave tras él.

[Rol] Gilledus piensa para sí mismo. Methaw tenía razón las ratas se encuentran en Ryniver...

[Rol] Gilledus se dirige a sus aposentos y se arrodilla frente al pequeño altar de Seldar que se encuentra en él.

[Rol] Gilledus se quita su sotana. Agarra su látigo de nueve colas y comienza a fustgarse con él.