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Nota: Gnomusad hace de Bilops, el tendero de la tienda de magia.
    
Gnomusad, siguiendo las pistas de Dragacirr, se da una vuelta por el mercado de Anduar, intentando localizar al Clérigo de Seldar que tenia en su poder un pergamino rúnico.
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Mientras tanto, Cortaer intenta vender varios pergaminos a Bilops, de la Tienda del Pergamino Rúnico.


Cortaer conversa con el tendero aunque por su gesto se diría que lo que quiere es asesinarlo lenta y sangrientamente.


Bilops dice: Saludos Inquisidor Cortaer. ¿Que desea esta mañana?


Cortaer pregunta con voz sobrenatural: Tengo algunos pergaminos para la venta, ¿quiere hacer el favor de prestarme atención?, ¡maldito idiota!

Bilops exclama: ¡Inquisidor Cortaer! Esto es Anduar. Le recuerdo que los modales que gasta en Dendra aquí no le sirven.

Cortaer sonríe de forma siniestra.

    
Bilops dice: A ver, déjeme ver pergaminos... pero no siga por ese camino.

Cortaer dice con voz sobrenatural: No tengo porqué dar explicaciones a un amante del dinero.


Cortaer dice con voz sobrenatural: Me iré a otra parte con mis cosas.


Cortaer se gira para salir de la tienda.

Bilops dice: ¡Pues no vuelva!

    


 Cortaer, al escuchar las palabras del tendero, hace un leve gesto con su mano y aparenmente no ocurre nada... pero la sonrisa de suficiencia con la que sale de la tienda deja entrever ... cosas oscuras.

    
> noroeste
Anduar: Mercado [-se-,s,e]
Ciudadana, Mercader y Comerciante están aquí.

    

-|Cortaer|/- llega desde el -| SE |-.


Gnomusad, se choca con Cortaer en la entrada de la tienda de magia.


Dices a Cortaer: Uis, perdone...

Cortaer te gruñe amenazadoramente.

Cortaer murmura para sí mismo escoria, todos escoria...

Gnomusad observa de arriba a abajo al Clérigo de Seldar... es el hombre que buscaba, el que intentaba vender los pergaminos según Dragacirr.

Exclamas en adurn: ¡Perdone! ¡Señor!

Gnomusad tira de la manga de Cortaer.

Cortaer se gira cuando el hombre le habla, lo mira de arriba abajo y vuelve a girarse ignorándolo.

Exclamas a Cortaer: ¡¡¡Ehhh, le estoy hablando a usted!!!

Gnomusad tira una pequeña piedra a Cortaer.

    
Cortaer te mira.
    

Cortaer exclama con voz sobrenatural: Oh, por favor... ¡gnomos! ¡gnomos! ¡gnomos!
    

Soldados Nivrims que se encontraban en el mercado se giran al ver el próximo conflicto que se acerca a producir.
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Cortaer se gira con tanta brusquedad que su armadura tintinea y empieza a extender sus manos con malévolas intenciones a quien se atreve a abordarlo con tal falta de respeto.

    
Gnomusad, ante la aterradora mirada de Cortaer, se lanza un hechizo de protección.

    
Comienzas a formular el hechizo 'Globo menor de invulnerabilidad'.
Pronuncias el cántico: 'mior secry sphyre'
Eres rodeado por un globo de protección.

Gnomusad alza las manos en señal de paz.
    

Exclamas a Cortaer: ¡Solo quiero algo de información! ¡Puedo pagarle!
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Cortaer murmura en dendrita: laeyae lesea le yan searevilloiare le slloilaare, lyalaeyae llloi inaeareeareiloi le vlldlloiarea y ssearevilloiare le alae stuloiarlloiaealeza le l'laehaarea

Cortaer exclama con voz sobrenatural: Hable pronto y rápido, ¡que mi paciencia es corta! Que desea de un servidor de Seldar, duque del imperio de Dendra y servidor de la Fortaleza de D'hara.

Dices a Cortaer: Tengo entendido que esta usted intentando vender un pergamino de magia rúnica.
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Cortaer pregunta con voz sobrenatural: Y desde cuando mis asuntos son de su incumbencia? Además, dinero, quien demonios quiere dinero, ¡por Seldar bendito!

Cortaer mira al cielo mientras exclama... ¡lo que debo hacer por ti, Padre...!


Dices a Cortaer: Sus asuntos no son mi de mi incumbencia, pero si la búsqueda de las runas antiguas. Es mi principal tarea.


Preguntas a Cortaer: ¡Si usted tiene uno en su poder! ¿Que desea para intercambiarlo?
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Cortaer exclama con voz sobrenatural: Runas antiguas, runas antiguas... ¿y quien eres tú para interesarte por dichos temas?

    
Dices a Cortaer: Gnomusad, Iniciado rúnico de la Congregación Rúnica, aprendiz de la Antigua Faethyra.
    

Cortaer lo niega absolutamente todo.



Cortaer su gesto se pone todavía más torbo si eso es posible mientras dice entre dientes...

Cortaer dice con voz sobrenatural: Runas, elfos, gnomos... y a saber que más chusma os juntáis en la susodicha Torre Rúnica... me da igual quien sea quien nombras. pero los pergaminos que tengo en mi poder no son de tu interés.

Cortaer dice con voz sobrenatural: Pero ya que estamos...

    
Gnomusad atiende con interés.
    

Cortaer dice con voz sobrenatural: Pregúntale al incompetente de ahí.


Cortaer señala al la tienda con desprecio evidente.

Cortaer dice con voz sobrenatural: Seguro que ese tiene algo que decirte al respecto.


Exclamas a Cortaer: ¡Entendido! Pues marche son su mal talante a otro lugar. Me habré confundido de Clérigo de Seldar. ¡Pero como tenga el pergamino rúnico no dude que volveré!


Cortaer pregunta con voz sobrenatural: Aunque lo tuviera, ¿a cambio de que te lo daría a ti?, ¡sucio gnomo! ¿tu ciencia no te basta y sobra?


Gnomusad ignora las ultimas palabras de Cortaer, marchándose a la tienda de magia. No perderá más tiempo con personas de tal talante.


Cortaer sonríe de forma diabólica cuando ve al gnomo entrar en la tienda...


Una pestilencia inunda las fosas nasales del gnomo, cuando activa un hechizo. Sin duda, el Clérigo de Seldar dejo allí su marca.
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Cortaer escucha de pronto dos alaridos que surgen de la tienda de magia, cuando la plaga de lepra se expande al pisar el gnomo algo que había dejado a tal efecto.

    
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