17:07 Galinzdra se encontraba paseando en una dura noche de guardia, por las oscuras y desiertas calles de Anduar. Cuando se cruzo con un encapuchado de tez oscura... Comienzas a formular el hechizo 'Luz'. Pronuncias el cántico: 'magius lios' Señalas la Vara de Mordekainen que es rodeada por un campo de luz. Galinzdra dice encantadoramente: Que la luz ilumine mi camino y aleje las sombras oscuras.... De repente, el encapuchado se descubre dejando su rostro al descubierto, es Rhylzaer! Galinzdra da un pequeño respingo, recordando su ultimo encuentro con Rhylzaer. Galinzdra dice encantadoramente: ¡Rhylzaer!... tu por aquí... Rhylzaer exclama: ¡La encontré! ¡A mi la guardia! ¡A mi la guardia! Galinzdra sin entender lo que pasa, mira a su alrededor. Galinzdra dice encantadoramente: ¿Como? ¿Que pasa?... Rhylzaer pregunta: Sí, ¿acaso te sorprende encontrarme por aquí? Galinzdra dice encantadoramente: No me sorprende... la verdad. Rhylzaer pregunta: Quizás me esperabas....¿haciendo guardia en las puertas como bobo? Galinzdra dice encantadoramente: Ambos somos Reclutas Nivrims, servimos y protegemos Anduar. Rhylzaer exclama: ¡Aha! ¡Pero tu me hechizaste! Galinzdra comienza a decir una disculpa... Galinzdra dice encantadoramente: No ... No se que quieres decir Rhylzaer. Rhylzaer exclama: Mi propia camarada, ¡¿Como pudiste?! Galinzdra asiente tristemente. Galinzdra dice encantadoramente: Tienes razón Rhylzaer, lo reconozco. Galinzdra dice encantadoramente: Sacaste a flote oscuros recuerdos que intento ahogar. Rhylzaer se sorprende ante la rápida confesión de Galinzdra Galinzdra dice encantadoramente: Y no pude seguir aguantando mantener la conversación contigo. Galinzdra comienza a llorar profundamente. Galinzdra dice encantadoramente: ¡Recurrí a mi saber arcano para acallar un compañero! Galinzdra coloca sus muñecas a disposición de Rhylzaer. Galinzdra dice encantadoramente: ¡Detenme! ¡No merezco ser una Nivrim! Rhylzaer dice: ¡Vaya! No me esperaba esto... Galinzdra sorbe un gran moco, entre sollozos. Rhylzaer dice: Desconozco que penurias has pasado, para recurrir a la magia contra un compañero. Rhylzaer dice: Pero, no mezclemos al gremio en esto.. Galinzdra dice encantadoramente: Si, tienes toda la razón, fue una salida fácil y traicionera. Rhylzaer exclama: ¡Heriste mi orgullo y honor! Galinzdra dice encantadoramente: ¿Entonces no me vas a entregar al General? Rhylzaer dice: No, no te preocupes por eso. Además, un inútil castigo físico no resarcirá tu ofensa Rhylzaer exclama: ¡Escúchame bien! ¡Yo llegaré a ser el más poderoso mago de Eirea! Galinzdra baja las muñecas, que hasta ese momento ofrecía a Rhylzaer. Galinzdra dice encantadoramente: No lo dudo... compañero. Rhylzaer exclama: ¡Y no toleraré ninguna humillación como esa! Galinzdra dice encantadoramente: Te animo pues a seguir arduamente ese camino. Rhylzaer retrocede un paso y adopta una posición ofensiva Rhylzaer exclama: ¡TE RETO A UN DUELO MÁGICO! Rhylzaer exclama: ¡EXIGO UN JUICIO POR COMBATE! Galinzdra alza sus manos para taparse la boca. Galinzdra dice encantadoramente: ¡Un duelo mágico! Galinzdra dice encantadoramente: ¿Acaso sabes lo que estas diciendo? Rhylzaer exclama: ¡Aha! Así de paso, te demostrare como la magia pura puede superar cualquier ridícula especialización! Galinzdra dice encantadoramente: Bien... si es lo que deseas.... Galinzdra dice encantadoramente: Te concedo la victoria, no voy a pelear con un compañero con el riesgo de herirle. Rhylzaer hincha el pecho con orgullo, y desenvaina su poderosa Vara de Mordekainen. Galinzdra dice encantadoramente: Por mi parte, le diré a todos que eres más poderoso que yo y que me has ganado. Rhylzaer exclama: ¡No escaparas de esta con tus burdos engaños! Galinzdra dice encantadoramente: No son engaños... Rhylzaer exclama: ¡VAMOS! ¡Defiéndete! Galinzdra observa preocupada la ira en los ojos de Rhylzaer. Galinzdra dice encantadoramente: Rhylzaer... no voy a defenderme... Sin pensarlo dos veces, Rhylzaer realiza un elegante y rápido movimiento con su bastón y lanza un poderoso rayo de energía a Galinzdra. Galinzdra al ver la violenta acción de Rhylzaer, salta a un lado, quemándose parte de la túnica que viste. Galinzdra dice encantadoramente: ¡Estas loco! ¡Casi me das! Galinzdra conjura un hechizo 'Escudo de energia'. Galinzdra es rodeada y protegida por un escudo invisible. Rhylzaer se ríe demoniacamente. Galinzdra dice encantadoramente: ¡Vuelve a tus cabales! ¡No quiero herirte! Rhylzaer pregunta: ¿Crees que podrás protegerte con ese "escudito"? Rhylzaer empieza a formular un poderoso hechizo. Galinzdra insufla todo su poder a su escudo protector. Rhylzaer ejecuta los movimientos de hechizo "Desintegrar" Galinzdra conjura rápidamente un hechizo montura, apareciendo una mula frente a ella. Rhylzaer exclama: ¡Un deslumbrante haz de luz se genera en la habitación, cegando a todos los presentes! La mula conjurada de Galinzdra explota cuando recibe el hechizo de Rhylzaer, quedando unicamente un rastro de polvo de cenizas. Rhylzaer exclama: ¡MALDICIÓN! Galinzdra dice encantadoramente: ¡¡Rhylzaer!! ¡¡¡Tranquilízate!!! Rhylzaer, cegado de ira, empieza a formular otro hechizo Galinzdra comienza a formular otro hechizo. Rhylzaer pronuncia el cántico "Aaaadava Kedav...." ¡Pero súbitamente se detiene! Rhylzaer exclama: ¡¿En serio?! Rhylzaer pregunta: ¿De verdad no te vas a defender? Galinzdra detiene su formulación. Rhylzaer rebufa indignado. Galinzdra dice encantadoramente: Defenderme si, dañarte no, Rhylzaer... Galinzdra dice encantadoramente: Como te dije, no voy a pelear contigo. Rhylzaer dice: ¿Ves? Lo que decía...menuda pérdida de tiempo sois los especializados Rhylzaer exclama: ¡Ni siquiera sabéis divertiros! Galinzdra abre la boca, con la mandíbula desencajada. Rhylzaer se ríe educadamente. Galinzdra dice encantadoramente: ¿¿Divertirte?? ¡Serás sádico! Galinzdra dice encantadoramente: Eso no es diversión, eso es salvajismo. Galinzdra dice encantadoramente: Si me hubieras dado con el hechizo desintegrar... no se si mi escudo hubiera aguantado. Rhylzaer se ríe como un pervertido. Galinzdra mira los restos de ceniza y la rotura de su túnica. Rhylzaer exclama: Bueeeno, ¡Ya será menos! Galinzdra dice encantadoramente: ¡Y ahora quien me compra una túnica nueva! Rhylzaer exclama: ¡Tampoco te hubiera matado! Galinzdra comienza a encenderse... la vena de su frente se hincha poco a poco. Rhylzaer exclama: Hace pocos días deposité una de Urlom en el baúl del gremio, puedes quedártela! Galinzdra dice encantadoramente: ¡¡¡¡Rhylzaer!!!! ¡Me las pagarás! Rhylzaer se acerca a Galinzdra y la agarra, pasando su brazo por encima de sus hombros. Rhylzaer exclama: Venga, mujer, no seas melodramática, te invito a un trago en la posada! Rhylzaer exclama: Ahora ya sabes porque me llaman: ¿EL MAGO SALVAJE! Rhylzaer se ríe como un pervertido. Galinzdra y Rhylzaer continuaron un rato más esa noche discutiendo en la taberna. Mientras los vecinos de las casas circundantes que se habían asomado a sus ventanas, durante el desdichado espectáculo, tuvieron comidilla para los cuchicheos para varios días. 17:32 |