Current MUD: Reinos de Leyenda 2 Number of logs: 15671 Number of players: 4956 Moderated by: Satyr Zilar Kaitaka Eckol sierephad
Listing log
Title: La Inspiración, Historia de LhandonDate: 28.06.2020
Winners:   Losers:  PPW: 0.00  
Click here to turn OFF Colors
Lhandon está vagamente estirado en su cama de pluma de ganso y sábanas rojas, afinando su banjo. La luz del día entra por la ventana de cristal estilo clásico y una estela de luz polvorienta ilumina un rincón de la pequeña habitación.

Lhandon estira el brazo intentando alcanzar algo… agarra un dardo, apunta con un ojo, y lo lanza avispadamente, clavándolo en un poster de “Se busca”, con la imagen de Jacobus colgando en la puerta. El dardo le impacta entre frente y frente. Repite el mismo movimiento varias veces, impactando en un ojo, nariz, oreja….

De súbito la puerta se abre y Kelnozz asoma por ella. Un dardo veloz se dirige hacia él, cuando de repente…

Tirada de salvación Ts-Agilidad (66:) 33. Éxito.
Kelnozz esquiva hábilmente el dardo arrojado por Lhandon.

- Un maullido se oye desde el fondo del pasillo -.

Kelnozz: Hey Lhandon, ¿qué haces?
Lhandon: ¿Emperor, Ves porqué es importante llamar antes de entrar?
Kelnozz: Sí sí, claro, oye mira, esta noche hay fiesta en Galador, en la taberna, ¿te vienes?
Lhandon: ¿Quién la monta?
Kelnozz: No se un tipo de dinero, un orgo o algo así, en el sótano donde la movida de los clavos esa que te gusta tanto. Tengo dos pases.
Kelnozz se saca del bolsillo dos papeles dorados con un sello rojizo.
Lhandon se incorpora de repente de un salto y dice sonriendo… “Cuenta conmigo”.
Kelnozz: A la novena campanada de la iglesia en la entrada, nos vemos allí, se discreto.

Kelnozz cierra lentamente la puerta tras él y Lhandon, prepara sus mejores ropajes, instrumentos y llena su petaca de alcohol. No sin antes, arrojar violentamente una daga en el póster de la puerta, clavándola hasta la empuñadura en el rostro del forajido.

***

Llegó la noche. Todos los gatos se volvieron pardos y como sombras en la oscuridad, nuestros protagonistas se escabulleron entre los callejones del rabal hasta la entrada de la posada. Una vez allí, un Ogro con los brazos cruzados vigilaba cada uno de sus movimientos. Kelnozz sacó ambos papeles y los entregó en mano. El Ogro los revisó, miró a nuestros héroes y dando un paso a un lado, permitió la entrada a ambos.
Una vez dentro se dirigieron al mostrador. Allí estaba Esteban limpiando un vaso y cuatro bebedores empedernidos dando ambiente de taberna mal acomodada y desatendida. Con un guiño, Esteban pisó un mecanismo y una trampilla se abrió tras su barra. Ambos héroes bajaron por ella hasta la planta inferior. Recorrieron un húmedo y desaliñado túnel de piedra caliza hasta llegar a un portón custodiado por dos orcos. Estos revisaron que nuestros personajes no tuvieran armas y golpeando el portón con sus nudillos, les permitieron la entrada.

Aquel lugar era una fiesta como ninguna. Una enorme sala llena de bebida, comida, mujeres, mesas con apuestas, borrachos discutiendo sobre estupideces que no interesan ni a ellos mismos, una piscina de bolas y música ambientada por cantautores de prestigio.
Lhandon se sentía como en su salsa. Cegado por las luces de las antorchas y el oro reluciente de las joyas de los más adinerados, se sentó en una mesa junto a cuatro conocidos y empezó a charlar como si hubiera estado allí horas. Kelnozz se sentó a su lado.

Las horas pasaron entre jarra y jarra, historia y historia y broma tras broma. Cuando en un momento dado, un goblin verde como moco de troll, cabello negro desaliñado, tuerto y dentadura negra como un retrete de Mor_Groddur dijo…

Goblin: ¡Eh Bardo!, mira que tengo…

El goblin dejó una bolsita de un polvo blanco como el azúcar sobre la mesa.

Goblin: Vamos a darle un poco, ¿sí o sí?

Lhandon agarró la bolsita.

Lhandon: ¿Es pura?

Goblin: Como el alma de una virgen de Eralie.

Lhandon: ¡Uo!, ¡Vamos a verlo!

Lhandon arrojó un poco de polvito sobre la mesa, lo alineó con una tarjetita publicitaria del hostal Comellas.

Goblin: Pero espera loco, que primero hay que cort…..

No pudo terminar la frase cuando Lhandon esnifó con fuerza todo aquel polvo. Levantó su sonriente cara al cielo, se limpió los restos de la nariz, y asintió feliz repetidamente a sus compañeros.

¿Dije que el Goblin era verde como un moco de troll? Se quedó pálido. Ahora era de un verde Velian.

Lhandon: Qué pasa, es que nadie más se va aani…..

Las caras de los tertulianos parecían deformarse. El espacio tiempo ya no era constante, más bien curvo…
La cabeza de un semi-drow apareció rotando sobre su eje y así mismo trasladándose por la estancia hacia Lhandon, aumentando su tamaño y explotando soltando confeti de colores por toda la estancia… Luces plasmáticas y sonidos nunca antes descubiertos inundaron los sentidos de nuestro músico. Todo se volvió negro. Una luz, al final del túnel y una voz de ultratumba decía…

“Lhandon…. Lhaaaandooon…”

Lhandon, tembloroso en la oscuridad miraba hacia la luz, cegado…

Lhandon: ¿Quién eres…?

Una silueta negra fue adquiriendo forma.

Ser Extraño: Lhandon… soy Guldan… el dios de… ¿de qué era…?

Se presenta ante él una cabeza humana, imberbe, con una tremenda calva y de fondo pelo grisáceo y descabellado. Su voz es similar a la de un anciano.

Lhandon: Pero pero… ¡No te imaginaba así…! ¡Que extraño sois!

Guldan: Sí bueno, digamos que… Esta es solo mi forma física material mundana. El espacio
es… ligeramente curvo. Al tema, vine para... ¿de dónde vengo...? Tú, tú ¿venías...?

Lhandon Se arrodilla, pone un puño en el suelo y con el rostro completamente serio y la mirada iluminada dice… Oh Gran Guldan, has venido para ilustrarme en… “algo”.

Guldan: Ah sí claro, ya… recuerdo, bien, sí, empecemos. Toma nota…
Una base repetitiva de tambor y banjo suenan de fondo.

Guldan canta con voz de gallifante….

Guldan: Llegó el día, Sí, en que vi una doncella lozana
Guldan: La monté en mi caballo y dije: ¡A esta le quito las ganas!
Guldan: Llegamos hasta mi fuerte y allí le enseñe mi falo,
Guldan: Qué revés, hostión y se marchó, fue un gran fracaso.

Guldan se pone sus gafassolaresgiroscópicas de color negra, cruza los brazos y empieza a asentir con la cabeza al ritmo de la música. De fondo, aparecen Kelnozz y Avendrok con las manos en la boca, emitiendo algún tipo de sonido extraño acorde al ritmo de la canción, mejorando la base.

Guldan: Apréndete la lección para que no te pase luego,
Gudlan: Antes de ensartar la espada, has de templarla al fuego.
Guldan: La mujer es como un cajón, tu la llave en la cerradura
Guldan: Pero no pretendas abrir si antes no la has puesto bien dura.

Lhandon está perplejo, intentando entender el mensaje de todo aquello.

Guldan: Con estas palabras me despido, si dije Diego ahora “digo”,
Guldan: No puedes ser caballero si solo te miras el ombligo,
Guldan: Ahora ya estoy casado, con la gran diosa del amor,
Guldan: Te toca ocupar mi lugar, ensártalas de dos en dos.

Guldan se arrodilla y su figura se desvanece como un cuadro al óleo bajo la lluvia. Lhandon se percibe a sí mismo en tercera persona, girando hacia una espiral que le engulle, como un tremendo cagarro es engullido por el agua del retrete…. Y de repente todo es oscuridad y los sonidos de tambores y trompetas quedan ya muy lejanos.
En la taberna todos permanecen inmóviles. Lhandon, con los ojos abiertos como platos, las cuencas de los ojos oscuras como una noche en vela, la mandíbula desencajada y la mirada perdida en el infinito.

Kelnozz: Pero… ¿qué le has dado…? Aún no despierta, lleva así… como una hora.

Goblin: Paciencia, volverá… todos vuelven… creo….

Lhandon de repente despierta. Mira a su alrededor. La fiesta sigue y todos se alegran de su vuelta al plano mundano.

Goblin: ¡Eh eh ha vuelto!, ¿Oye que tal…?...

Lhandon se mira perplejo, se palpa la cara, el cuerpo... Suelta unas monedas encima de la mesa y sin mediar palabra agarra su pluma, un papel, y sale corriendo de aquella estancia hacia sus aposentos personales.

Kelnozz: Casi que yo… paso de probar eso, prefiero disfrutar de la fiesta… ¿no veas que bajón más malo da no?

Goblin pone cara extraña y dice: No lo entiendo, pues si dicen que es buena buena…
Nginx.ru php.net MySQL.com Debian.com
Rlmud.org Hosted by
Reinos de Leyenda
 
Deathlogs.com Originaly created by
Espen Solbu